La hipertensión, una amenaza a tratar
Las enfermedades hipertensivas han duplicado el número de fallecimientos en España en la última década, pasando de 6.661 fallecimientos en 2005 a 12.674 en 2015, según los últimos datos publicados por el Instituto Nacional de Estadísticas (INE).
La hipertensión arterial se trata de una patología que sufre el 42,6% de los españoles, de los que el 37,4% está sin diagnosticar debido a que no presenta unos síntomas claros. Su mayor peligro es que puede llevar al desencadenamiento de complicaciones graves como, por ejemplo, un infarto de miocardio o una hemorragia o trombosis cerebral.
Sin embargo, la buena noticia es que la hipertensión se puede tratar y, ante estas cifras tan alarmantes, algunos organismos oficiales como la Fundación Española del Corazón (FEC), perteneciente a la Sociedad Española de Cardiología (SEC), hacen hincapié en la importancia de su prevención y control.
Medicamentos genéricos en el tratamiento de la hipertensión
A la hora de tratar la hipertensión hay dos focos de acción fundamentales: mejorar los hábitos de vida, llevando una dieta saludable y practicando ejercicio; y llevar a cabo un tratamiento farmacológico.
La gran mayoría de los medicamentos que se utilizan para tratar la hipertensión ayudan a relajar los vasos sanguíneos para reducir la presión arterial. Entre estos, los que se prescriben con mayor frecuencia son los inhibidores de la enzima convertidora de angiotensina (inhibidores IECA), los bloqueadores de los receptores de angiotensina II (BRA), y los bloqueadores de los canales del calcio, que relajan los vasos impidiendo que el calcio entre en las células.
Por otro lado, están los diuréticos, que ayudan a los riñones a eliminar algo de sal para que los vasos no contengan tanto líquido; y los betabloqueadores, que ayudan al corazón a palpitar más lento y con menos fuerza.
Entre todos estos medicamentos para tratar la hipertensión hay una amplia gama de medicamentos genéricos. Cabe recordar, que los medicamentos genéricos cuentan con las mismas características farmacocinéticas, farmacodinámicas y terapéuticas que su homólogo de marca.