Día Mundial del Corazón: enfermedades cardíacas
El Día Mundial del Corazón se celebra en todo el mundo con el objetivo de concienciar sobre la necesidad de prevenir las enfermedades cardíacas y otros problemas de salud relacionados con este órgano.
Como cada año, el 29 de septiembre se celebra el Día Mundial del Corazón. En esta cita, personas de todo el mundo, profesionales sanitarios y pacientes unen sus fuerzas para concienciar sobre la importancia de cuidarse para prevenir enfermedades cardíacas.
Aproximadamente 17,5 millones de personas mueren cada año a causa de enfermedades cardiovasculares, entre las que se incluyen las enfermedades cardíacas y las cerebrovasculares. Actualmente este tipo de patología, la enfermedad cardiovascular, es la primera causa de muerte en todo el mundo y se estima que la cifra ascenderá a 23 millones en el año 2030.
Desde la Fundación Española del Corazón lanzan así el siguiente mensaje durante el Día Mundial del Corazón haciendo referencia a las muertes que produce la enfermedad cardiovascular: “Pero esto no tiene por qué ser así. Si haces pequeños cambios en tu vida, tendrás una vida más larga, saludable y plena. Solo se trata de preguntarte a ti mismo, a las personas que quieres y a gente de todo el mundo: ¿qué puedo hacer desde este preciso momento para cuidar mi corazón y tu corazón?”
El Día Mundial del Corazón, afirman, es una buena oportunidad para hacer promesas de cara a acostumbrarse a realizar hábitos saludables, como cocinar y comer de forma saludable, hacer más ejercicio físico, así como animar a tus hijos y a los más pequeños de la casa a ser más activos. Por supuesto, entre estos compromisos se debe encontrar el de decir adiós al tabaco y ayudar a tus seres queridos a dejar de fumar.
Enfermedades cardiovasculares y tabaco
Las enfermedades cardiovasculares son la principal causa de muerte en todo el mundo. El consumo de tabaco y la exposición al humo de segunda mano contribuyen en torno al 12% de las defunciones por cardiopatías. Un estudio del Grupo de Trabajo de Tabaquismo de la Sociedad Española de Médicos de Atención Primaria (SEMERGEN) sobre identificación de la población española de riesgo cardiovascular y renal (Iberican), indica que en España el 50% de la población adulta padece dislipemia, alteración en los niveles de lípidos (grasas) en sangre, fundamentalmente colesterol y triglicéridos; mientras que el 47% son hipertensos. Por otra parte, el 75% de la población de nuestro país acude al menos una vez al año a las consultas de atención primaria y el 30% de los adultos es fumador.
Las consultas del médico de familia son escenarios adecuados para promover la salud cardíaca protegiendo a las personas del consumo del tabaco. Allí, el médico se implica en el correcto diagnóstico de los pacientes fumadores y en el tratamiento para disminuir las enfermedades cardiovasculares, así como las muertes consecuencia de ellas.
Hábitos saludables
Recientemente, este mismo año, se publicó un estudio en la revista científica The Journal of Physiology que concluye que sería necesario hacer ejercicio de cuatro a cinco veces por semana para evitar que las arterias principales del corazón se endurezcan hasta producir complicaciones de salud.
Los investigadores que participaron en este trabajo señalan que cualquier forma de ejercicio reduce el riesgo de problemas cardíacos y de enfermedades cardíacas. Asimismo, dicen que la cantidad correcta de ejercicio en el momento concreto de la vida de la persona podría revertir el envejecimiento del corazón y los vasos sanguíneos.
En lo que se refiere a la alimentación saludable, la dieta mediterránea es el aliado perfecto para evitar y prevenir enfermedades cardíacas. Esta dieta ayuda a adoptar patrones de alimentación ricos en frutas y verduras, grasas saludables y granos enteros. Por otra parte, al no restringir ningún grupo de alimentos, evita la ansiedad y la hace más sana y variada; y aunque no requiere un ejercicio intenso, los expertos sí recomiendan combinarla con media hora de actividad deportiva diaria para fortalecer el corazón, fomentar la pérdida de peso, y frenar los antojos.