Esos adolescentes llamados "genéricos"

Genérico es el conjunto de seres con las mismas características. Adolescencia es ese periodo entre la niñez y la adultez de las personas, situado entre los 14 y 20 años. Yo veo un símil entre los medicamentos genéricos y nuestros jóvenes en España pues ambos han compartido los últimos 16 años. 

En 1996 yo ya disfrutaba de lo que podríamos denominar un “Elemento Familiar Generacional” (EFG). Tras invertir tiempo y dinero en su desarrollo como persona llega el día que puedo afirmar que se ha hecho mayor, ha demostrado ser una estudiante eficaz, sabe cuidarse sola, es experta en buscarse recomendaciones, tiene ganas de independencia. Mis hijos, como los genéricos, comparten el mismo principio activo con sus padres aunque algunos siempre dudarán que sean realmente equivalentes a ellos.

Una vez que nuestros hijos pasan la barrera de los 16 años ya nos recuerdan a diario que son autónomos, responsables,que ya no necesitan de nuestros consejos, cuidados ni enseñanzas. Efectivamente, han ido creciendo y madurando, ya no son pequeños a los que hemos de guiar por la vida, ahora hemos de permitir que busquen su propio hueco, vivimos sorprendidos de lo que ellos mismos nos enseñan, saben más de lo que nos creemos. Hemos de estar en actitud de seguir aprendiendo de nuestros hijos siempre. Los aspectos tecnológicos no es lo único en lo que nos pueden dar lecciones. Nuestros adolescentes tienen muchas habilidades de las que podemos aprender, nos enseñan a explorar nuevas vías, exactamente como están haciendo los genéricos ahora.

Con nuestros adolescentes, al igual que con los genéricos, todo es un tema de confianza. Cuando estamos dispuestos a dar a nuestros hijos un voto de confianza, la satisfacción por los resultados es mutua. Los jóvenes confían como nadie en sí mismos, no se rinden en ningún momento, no les falta nunca la ilusión, no se entregan a la autocompasión, a la desesperanza, al desconsuelo. Son unos luchadores y no cometen el error de pensar que su bienestar depende de los demás. Cuando pregunto a mis amigos qué aspectos destacarían de la convivencia con sus hijos adolescentes, más de uno me responde que las dificultades de crecer con ellos. Eso es así porque cada uno de nuestros hijos persigue sus sueños y nos cuesta dejarles que inspeccionen, que experimenten, que descubran.

Hay muchas formas de convivencia válidas, hay que ser valientes y aceptar aquellas que a lo mejor nos daban miedo o provocaban inseguridad. De nuevo, pienso que hay semejanzas en nuestra relación con los genéricos. Las medidas de promoción para el uso de los medicamentos genéricos en España se remontan a finales de los años 90, una década más tarde de haberse introducido ya con éxito en el centro y norte de Europa donde ya no es necesario promover su disponibilidad ni fomentar su utilización. Sin embargo, en España aún estamos acostumbrándonos, tenemos una cuota de mercado en unidades del 36% frente al 60% del entorno europeo. La gente tarda un tiempo en acostumbrarse a nuevos entornos, pero siempre acabamos disfrutando de las nuevas experiencias.

Mis hijos me trajeron estabilidad emocional y creo que podemos afirmar que los genéricos nos han traído estabilidad de precios al mercado pues han forzado a los medicamentos de marca a bajar precios una vez vence su patente. Durante el pasado Symposium de AEFI se debatió sobre el futuro del sector farmacéutico y se compartieron algunas claves para la supervivencia de los genéricos. Fue comentada la incertidumbre regulatoria en la que se encuentra sumergida el sector. Así igualmente vive nuestra juventud, con la incertidumbre sobre su futuro laboral. Ante los pesimistas que ven en los jóvenes una generación perdida, me gusta recordarles que 9 de cada 10 españoles confían plenamente en los medicamentos genéricos y más del 89 por ciento los utiliza con regularidad. Los jóvenes son nuestro futuro, no lo duden. Déjenles elegir su camino. Nuestros adolescentes son seres humanos complejos y apasionantes, así veo yo a los genéricos.

Artículo original de Irene Tato, publicado en el número de julio de 2013 de la revista En Genérico.