Objetivo: seguir creciendo
EDITORIAL
Por Raúl Díaz-Varela, presidente de AESEG
Asociación Española de Medicamentos Genéricos
La 21 Conferencia Anual de la EGA, celebrada recientemente en Berlín, puso de manifiesto una vez más el compromiso de las patronales europeas de medicamentos genéricos, entre ellas AESEG, con los pacientes, con la calidad, con la mejora de la salud de los ciudadanos, con la sostenibilidad y con la colaboración con todos los agentes del sector sanitario, especialmente la administración pública.
En los últimos 10 años, el uso de medicamentos genéricos en Europa ha registrado un aumento del 100% en siete de las áreas terapéuticas más relevantes, con una reducción de costes de alrededor del 60%.
En España los medicamentos genéricos también ganan protagonismo. Actualmente, son los que están dando impulso al conjunto del mercado farmacéutico español. Su comportamiento positivo contrasta con las pérdidas sufridas por los medicamentos de marca. Pero los genéricos solo representan el 38% del mercado en unidades, están muy lejos aún del 60% de media alcanzado en el entorno europeo.
Para poder seguir siendo actor en el control del gasto farmacéutico en el Sistema Nacional de Salud (SNS), el sector tiene que continuar creciendo. Pero su capacidad para hacerlo está cada vez más limitada. El número de productos con las patentes a punto de vencer es mucho más reducido que hace 4 o 5 años. Su desarrollo depende en gran parte de las medidas que se puedan adoptar desde la Administración. Entre ellas, el sistema de subasta de medicamentos implantado en Andalucía o el proyecto de nueva ley de patentes que actualmente se debate en las Cortes Generales, temas protagonistas de este número de En Genérico.
Las subastas andaluzas de medicamentos, además de no contribuir a la sostenibilidad del modelo actual de Farmacia, están teniendo claros efectos negativos para la industria de los genéricos y, por tanto, para el Producto Interior Bruto (PIB). Según los autores del informe ‘Competencia entre proveedores sanitarios en la Unión Europea’, los programas de licitación de medicamentos pueden generar ahorros sustanciales a corto plazo pero también presentan efectos sobre la disponibilidad de fármacos y la sostenibilidad de la industria de medicamentos genéricos. Deja fuera del sistema a los pequeños laboratorios y limita la industria nacional, favoreciendo la destrucción de empleo y la reducción de la inversión.
Por otro lado, con la tramitación de la nueva ley de patentes el Gobierno tiene la posibilidad de facilitar que los fabricantes de medicamentos genéricos españoles puedan competir en el mercado internacional. «Todo ello se traduciría en la ampliación de la capacidad industrial de nuestros centros productivos, en inversión en nuevas plantas industriales, creación de puestos de trabajo, especialmente cualificados, y recuperación del tejido industrial en un área estratégica fundamental».
Apostar por el desarrollo de la industria de medicamentos genéricos es apostar por el crecimiento de nuestro PIB, lo que indudablemente redundará en beneficio de una mejor sanidad.
En AESEG estamos comprometidos con la búsqueda de propuestas que afiancen la sostenibilidad, eficiencia y racionalización del gasto farmacéutico público del SNS y garantizar, de esta manera, un equitativo y eficiente acceso a los medicamentos. Pero esta búsqueda debe ir más allá de políticas de contención. El gasto en medicamentos está ya muy controlado y lleva muchos años sin crecer.